Bizcocho de chufa

 

Hoy os presento una interpretación de una receta sacada del blog El invitado de invierno, el cual os recomiendo no sólo por sus exquisitas recetas sino también por sus fotos, merece la pena verlo sólo por disfrutar visualmente de su presentación.

He interpretado la receta porque en ella parte de harina de chufas sobrante de preparar horchata seca y yo no he secado la harina. Al partir de una harina más húmeda he alterado las cantidades de líquido. Como ha salido estupendo, ahí va mi receta.

La harina de avena la he puesto de mi cosecha, ya os digo, la imaginación al poder.

Ingredientes: 

3 huevos

200g de azúcar

100g de harina de chufa húmeda, resultante de la elaboración de horchata.

250g harina de trigo

50g harina de avena

175g leche

20g de levadura química 

150g de aceite

Para el toque final, la cobertura

1/2 tableta de chocolate fondant

1chorrito de leche

Mezclar todos los ingredientes por este orden y sin tener en cuenta los de la cobertura:

primero los huevos y el azúcar, y se baten mucho para ayudar a que suba, posteriormente el resto poco a poco, hasta hacer una masa homogénea sin grumos.

Precalentar el horno a 200ºC (el sistema que he usado es la cocina solar parabólica con un cacharro que hace que funcione como horno: una base rectangular metálica y su tapa correspondiente).

Cuando haya subido se baja  la temperatura a 180ºC y se tapa con un papel de aluminio para que no se queme la parte superior. Este paso no hay que tenerlo en cuenta cuando se trata de cocinar con el sol.

Dejar hasta que esté cuajado el bizcocho, haciendo una comprobación pinchandolo con un cuchillo. Si el cuchillo sale limpio, es hora de sacarlo.

Se funde el chocolate, mezclado con la leche y se aplica por encima a modo de cobertura.

Espero que os animéis primero a hacer horchata, que es una delicia y luego, a cocinar lo que otros denominan resíduo y os llevéis una grata sorpresa.

Eso sí, la chufa puede ser difícil de encontrar, si no vivís en el Levante español.